Por Tini Solanet (@tinitasolanet) en exclusivo para Decocasa

Me encantan los desafíos y la cocina de mi departamento no podía ser la excepción. La primera vez que entré y vi la cocina tipo chorizo, en mi mente ya estaba ideando un espacio totalmente renovado. De buenas a primeras me la imaginé acogedora y cómoda. Así como estaba me parecía imposible y ya que tenía muchos metros sobrantes en el living comedor, nos sumergimos en una obra para generar un cambio 

La cocina estaba dispuesta tipo pasillo, muy angosta y con un breakfast o comedor diario oscurísimo.

El living comedor era demasiado largo y sus 3.40 metros de ancho no “aguantaban” los casi 12 metros de largo. Se podia ver que era totalmente desproporcionado, literalmente un chorizo. Esos metros que sobraban en el living comedo los usamos para sumarlos a la cocina, contigua a este espacio.

Se tiró entonces abajo la pared que los separaba, se avanzó hacia el living comedor para dejar un gran rectángulo muy luminoso, donde quedó bien sectorizado.

Los muebles en madera laqueada blanca se dispusieron en L. En vez de poner las clásicas alacenas, como no quedaba mucha pared, dos grandes módulos de 60 de profundidad  a cada lado de la abertura que comunica con el lavadero, cumplen la función pero se obtiene mayor espacio de guardado y al mismo tiempo, del lado del “play room” se generó el espacio para la TV enfrentado a un sofá .

En el medio, una mesa con tapa en granito al igual que las mesadas (visualmente más liviana que una isla) es una zona más de trabajo y al mismo tiempo, hace las veces de desayunador.

 

El resultado? Colores claros para generar espacio visual y no restar la luz que penetra desde la gran ventana de Pvc que también se cambio y se agrando durante la reforma.

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