Quiero compartir con ustedes el último gran cambio que hicimos con mi marido en casa. Como siempre digo, el desafío es decorar con bajo presupuesto. Con dinero resulta mucho más fácil. Pero cuando escasea, hay que trabajar a todo motor el ingenio decorativo. Gracias a las ideas inspiradoras del arquitecto Gustavo Peláez de la Revista Living, le dimos rienda suelta a la creatividad e hicimos una biblioteca a medida con macetas de diferentes tamaños, tablas de melamina y un generoso tablón de madera.

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Vista panorámica de la biblioteca y mesa ratona que nace del módulo

Jugando con las macetas y las tablas se nos ocurrió dejar un espacio para ubicar el tablón de madera como mesa ratona. El contraste de la madera con el piso de cemento y las macetas queda fantástico.

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Utilizamos macetas vertical y horizontalmente. Pusimos 2 tablas de melamina entre las macetas como divisores.

El toque High Tech del monitor sobre la mesa baja brinda un aire de sofisticación al lado de lo artesanal.

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Detalle de la mesa baja.

Aprovechamos los nichos entre los ladrilos de hormigón que sostienen la madera para ubicar macetas y usar el espacio para guardado de revistas.

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Lijamos la madera y le quitamos las puntas peligrosas por los niños.

Y les gustó? Qué opinan?

Espero ansiosa sus comentarios.

Pilar