Un mismo mueble puede ofrecer un mundo de posibilidades. Todo depende de qué manera decidamos decorarlo y dónde lo queramos colocar. Veámos cómo funciona esta premisa a partir de una cómoda de madera blanca con tirantes negros.

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 Una buena forma de redecorar la cómoda sin gastar mucho dinero es cambiando los tirantes.  Aquí se optó por una alternativa algo campestre: trozos de cuero marrón.

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 Una versión súper femenina, tirantes que parecen perlas.

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 Si quieres trabajar un poco más puedes decantarte por el uso de pintura.  Aquí se destacarón los frentes y bordes para otorgar una apariencia más juvenil y varonil al mueble.

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 Una cómoda súper femenina en degradé rosa …

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 Y terminamos con otra alternativa perfecta para decorar el dormitorio de las pequeñas: un mueble celeste pastel donde los vinilos hacen la diferencia.

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Imágenes vía: Digs Digs